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El nombre proviene de la concentración de tribunales y curias, y otros órganos administrativos que se concentraban en este lugar. Desde 1249 los jurados se reunían en el antiguo Hospital de Sant Andreu (donde actualmente se encuentra el edificio principal del Ayuntamiento de Palma) fundado por Nuno Sancho en 1230. El hecho de que allí se reunieran las principales instituciones de la isla (La Universidad, Gran y General Consejo…) lo ha constituido como centro de la ciudad. De hecho, es el punto donde comienza el cómputo numérico de los kilómetros de las principales vías de la isla, KM 0.
El edificio principal de la plaza es el del Ayuntamiento de Palma, construido en diferentes fases entre 1649 y el siglo XIX. La fachada es el elemento más importante y reproduce el esquema de la manor mallorquina.En ella se pueden ver elementos que se han popularizado con el paso de los años como el Banco vago y el reloj sinofó s Figuera en el dragón y el caracol.
Desde 1989, casi en el centro de la plaza encontramos un inmenso olivo trasplantado desde Pedruixella Petit ( Pollença ). Fue regalado por el empresario Jaume Batle i Manresa. Se calcula que tiene más de 600 años y pesa unas 4 toneladas.
Mallorca actualidad
La Fiscalía (OM) acusó de perjurio a Martijn T., uno de los sospechosos del caso Mallorca. T. fue detenido ante el tribunal en el tercer día de vistas del juicio en torno a dos reyertas en la isla española que provocaron la muerte de Carlo Heuvelman, de 27 años, en julio del año pasado.
Martijn T. declaró previamente al juez instructor que nunca habló de las reyertas con los demás miembros de su grupo después de las peleas en Mallorca. Lo repitió el jueves, para sorpresa del tribunal.
Perjurio es dar falso testimonio bajo juramento. Cuando fue interrogado como testigo por el juez instructor en junio, Martijn T. dijo que después de la noche de las peleas no habló con los otros jóvenes sobre el papel de cada uno en las reyertas. Se fue a la cama después de tomar un vaso de agua, dijo.
La policía encontró el vídeo y varias fotos en la cuenta de Snapchat de Lars van den H. en agosto. En el vídeo se ve a Van den H. grabando las heridas en los nudillos. “Acabamos de tener una pelea en grupo”, escribió en el pie de foto. Luego apuntó con la cámara a otras personas de la villa, incluida T.
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Palma de Mallorca tiene mucho que ofrecer: Edificios modernistas, patios, iglesias, monasterios, un castillo y, por supuesto, la catedral “La Seu”. Esta última no es una visita obligada, pero sí lo es el Palacio de la Almudaina, o Palacio Real, situado justo enfrente de la catedral. El edificio morisco, entronizado majestuosamente junto al monumento más emblemático de Palma de Mallorca, ya llama la atención desde lejos. El Palacio de la Almudaina es uno de los principales monumentos de la ciudad, pero pocos conocen la historia de este edificio único, que representa como ningún otro el periodo de dominación musulmana de la isla. Merece la pena visitarlo, le contamos por qué.
El Palacio de Almudaina es una antigua fortaleza de origen árabe. Data de la época en que Mallorca estaba ocupada por los gobernantes moros del norte de África. Los moros gobernaron la isla de 902 a 1229 y la eligieron como base naval de importancia estratégica. Mallorca era un emirato por derecho propio, que vivía del comercio de esclavos y la piratería.
Pero la ocupación de la isla también tuvo sus cosas buenas. Por ejemplo, los gobernantes musulmanes trajeron a la zona ocupada su arquitectura (arcos apuntados y patios), agricultura (aterrazamientos como en Banyalbufar, sistemas de regadío, limoneros), especias (aún hoy utilizamos el azafrán y las pasas sultanas en nuestros platos) y urbanismo típico (callejuelas, plazas, casas adosadas ricamente decoradas, establecimientos de baño), configurando así la capital Palma de Mallorca hasta nuestros días.
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¿Cómo encontrar la ciudad detrás de la ciudad? ¿Un auténtico trozo de vida en Palma? Alójese en el Hotel Cort, en el corazón de la capital, y sumérjase en el rico patrimonio cultural y arquitectónico que la rodea. Este hotel boutique urbano se encuentra en la importante Plaça de Cort, frente al bello ayuntamiento de Palma del siglo XVII y el emblemático olivo milenario, protagonista de millones de fotografías turísticas.
En los cinco años transcurridos desde su apertura, el Hotel Cort ha acogido en invierno a huéspedes de toda Europa y, en verano, a gente de todo el mundo. Estos visitantes han descubierto que es el mejor hotel para explorar el casco antiguo, ir de compras por la “Milla de Oro” de la ciudad y probar nuevos y excitantes restaurantes.
Productos excelentes y mínimas interferencias. Así es la filosofía de la cocina mediterránea del Hotel Cort. Una cocina de mercado donde los elementos son tratados con el máximo respeto, fieles a la máxima “menos es más”.
Platos donde predominan los ingredientes básicos (aceite de oliva de primera calidad, patatas fritas caseras, una lechuga bien aliñada, pan con tomate…). Productos de temporada que se incorporan a las sugerencias culinarias diarias, para que los clientes puedan descubrir siempre nuevos sabores que probar.
